Es un proceso de análisis crítico de ingeniería que permite, como resultado del mismo, obtener de manera cabal la condición de un equipo para llevar adelante el propósito para el que fue diseñado.
La evaluación de integridad consta de varios pasos; el primero de ellos es el que define qué posibles mecanismos de daño tienen el potencial para desarrollarse en un activo y cómo éstos se manifiestan, seguido de ello, es necesario seleccionar aquellas herramientas de inspección aplicables que identifiquen, caractericen y registren de manera óptima y fehaciente la manifestación de la amenaza, para finalmente, maximizar el valor de las inspecciones desarrollando el análisis de la aptitud para el servicio para las condiciones actuales y futuras.
Un reporte donde se informan todas las condiciones consideradas anormales en la pieza o componente, documentado con imágenes de alta resolución que pueden utilizarse con fines investigativos. La determinación del tipo de causa identificada Física, Humana o Latente. La descripción de las causas de la falla, se explicitan los eventos, circunstancias y barreras excedidas que realmente influyeron en su ocurrencia.
Acompañamiento experto y asesoría para la gestión del activo, definiendo y respondiendo concretamente “¿Qué? ¿Cómo? ¿Con qué? y ¿Dónde buscar?”
Un informe, técnicamente sustentado, que permita asegurar la aptitud del activo en la condición actual y cuáles son los límites de operación permitidos bajo esa condición.
Brindamos, adicionalmente, la mejor tecnología disponible para llevar adelante la inspección y caracterización. Entre nuestros equipos ponemos a disposición:
- Ultrasonido Convencional
- TOFD
- Phased Array
- Partículas Magnéticas
- Líquidos Penetrantes
- Estudio de Vibraciones
- Identificación Positiva del Material
- Termografía
- Videoscopía
- Emisión Acústica